(Y a la niña que llevo dentro).
A esa preciosa niña que al llegar a la estación de Atocha y vaciarse el vagón guardó amablemente el asiento, el único que quedaba vacio, a su madre. Pobrecita ella que le decía que no se iba a sentar mientras la nena insistía en ello una y otra vez, hasta que se sentó.
A esa jodía niña, que me hizo la puñeta porque estaba con una migraña que me tenía mareada del todo, y me hubiese venido de perlas haberme sentado.
A esa niña repipi que me miró y me sacó la lengua (te faltó decirme "te fastidias").
Pues bien a ese producto de la evolución de la especie va dedicado esto:
Te fastidias (lease –te J-O-D-E-S-) tú por el piñazo que te diste en el andén, ¡sosona!.A esa preciosa niña que al llegar a la estación de Atocha y vaciarse el vagón guardó amablemente el asiento, el único que quedaba vacio, a su madre. Pobrecita ella que le decía que no se iba a sentar mientras la nena insistía en ello una y otra vez, hasta que se sentó.
A esa jodía niña, que me hizo la puñeta porque estaba con una migraña que me tenía mareada del todo, y me hubiese venido de perlas haberme sentado.
A esa niña repipi que me miró y me sacó la lengua (te faltó decirme "te fastidias").
Pues bien a ese producto de la evolución de la especie va dedicado esto:
Si, soy puñetera, lástima que no se hiciese nada.
3 comentarios:
¬¬
noto algo de rencor en el tono de esta entrada
¿Solo algo?.... XDD. Pero hubiese sido si imitando a Nelson le hubiese dicho, señalándola con el dedo, "Jaaa, jaaa".
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